Como líder, usted toma decisiones y gestiona personas, por supuesto, pero también es un líder cultural. Conscientemente o no, su forma de actuar y comportamiento transmite una amplia gama de mensajes culturales y prepara el escenario para una organización saludable o disfuncional. No es de extrañar entonces que el desarrollo del liderazgo sea una parte esencial de la transformación cultural.
Ayudamos a las organizaciones y sus líderes a reconocer su verdadero impacto cultural y adoptar un estilo de liderazgo auténtico, acorde a la cultura y resultados deseados.
El Programa de Desarrollo de Liderazgo cultiva las habilidades que los líderes necesitan para:
Trabajar de manera más efectiva con su equipo.
Utilizar mejor las "habilidades blandas" necesarias para crear un lugar de trabajo verdaderamente satisfactorio y productivo
Comprometerse con integridad y autenticidad, la base de la confianza
Encontrar una mayor satisfacción, significado y conexión en su trabajo.
Qué se espera del Programa de Desarrollo de Liderazgo:
Comenzamos entendiendo la situación actual de la compañía, su cultura y resultados deseados con el propósito de poder identificar luego ls brechas entre las competencias y habilidades del Liderazgo actual versus el Liderazgo deseado.
A continuación detallamos en forma general los pasos correspondientes al Programa:
1
Una evaluación de referencia de 360 grados de sus valores de liderazgo, fortalezas y áreas de crecimiento, basada en comentarios confidenciales de sus colegas elegidos.
2
Realizamos una revisión en conjunto con cada Líder para interpretar los resultados, explorar sus reflexiones e identificar áreas que necesitan más investigación.
3
Apoyamos y hacemos coaching a cada Líder para la elaboración de un plan de acción, incluidos los pasos específicos y medibles que puede tomar para vivir sus valores y liderar de manera más efectiva.
4
Realizamos un seguimiento del progreso de cada Líder, para que pueda ver qué está funcionando y dónde necesita cambiar su enfoque.
Los líderes juegan un papel crucial en el cultivo de una cultura óptima. Los líderes tienden a centrarse únicamente en los "impactos duros": resultados, políticas, rentabilidad, etc. Pero los líderes también tienen un enorme "impacto blando" que tiene que ver con el desarrollo de la cultura organizacional. Con frecuencia, pasan por alto este segundo rol esencial, una de las contribuciones más poderosas que pueden hacer para el éxito de su negocio.
De hecho, los líderes que se involucran en el desarrollo personal y de la cultura expresan su sorpresa por lo satisfactorio que es el proceso, lo medibles que son los resultados y lo rápido que es el retorno.
Más allá de los estrictos parámetros de desempeño, los líderes informan que el autodesarrollo los conecta con sus equipos en un nuevo nivel y los hace más hábiles para brindar un ambiente de trabajo que aprecia implícitamente la humanidad de sus empleados: el tipo de lugar de trabajo ideal en el cual el propósito, la motivación , y la productividad están todos vinculados.
LAS ORGANIZACIONES "NO CAMBIAN",
LOS LÍDERES SÍ
